Más desarrollo
Cobra impulso la producción de búfalos en el país
El ganado bubalino cuenta hoy con más de 100 mil cabezas, y su mayor crecimiento se registra en el nordeste argentino. Con interesantes posibilidades de comercialización de carne, leche y queso, tanto en el interior como en el exterior, la explotación de la especie se posiciona como una alternativa de economía sustentable para la región.
El búfalo es un animal con eficiencia de conversión y adaptación a condiciones difíciles para el vacuno, y es foco de investigación tecnológica y de interés empresarial, debido a su fertilidad, su longevidad, y sobre todo por su aptitud para producir carne, leche y trabajo.
Para profundizar acerca del desarrollo de la especie en el país el presidente de la Asociación Argentina de Criadores de Búfalos, Ing. Marcos Sava, dialogó con El Semanario y explicó cómo se logró pasar de los 1.300 ejemplares iniciales que había en 1976 a las más de 100 mil cabezas que posee Argentina actualmente. "Si uno lo ve desde el punto de vista de crecimiento de búfalos, es importante, ya que se trata de un promedio de arriba del 12 por ciento anual."
El desafío
Por otro lado, aseguró que estos 35 años ya son una etapa cumplida, "porque los búfalos ahora están teniendo una mayoría de edad; y hoy estamos pasando a una segunda etapa, que es otro comienzo, y es mucho lo que hay por hacer todavía."
Según comentó, "lo que se ha demostrado a lo largo de estos años es la gran eficiencia de producción del búfalo en el Norte argentino, y eso coincide con el desarrollo de las ganaderías en el subtrópico que se están intensificando cada vez más. Porque, la ganadería en la zona templada -que es la primera ganadería del país y la más importante- ha ido disminuyendo, ya que se ha ido trasladando hacia el Norte.
Como resaltó el presidente de la Asociación, "ahí es donde el búfalo comienza a tener protagonismo, porque tiene una mayor eficiencia de conversión cuando se trata de los pastos naturales con una calidad regular, y es por eso que en las provincias del NEA hoy hay una mayor población de búfalos."
En cuanto a la distribución del total del ganado en el país, señaló que 35 mil cabezas de búfalos se encuentran en Formosa; 30 mil en Corrientes; 12 mil en Chaco, Misiones tiene 2 mil -con la particularidad de que son la mayoría pequeños propietarios-; Entre Ríos posee unas 3.500 cabezas -porque aumentó mucho la población en esa zona, sobre todo en los campos bajos del sur entrerriano-; en Santa Fe hay unas 2500 cabezas; y el resto se distribuye entre la provincia de Buenos Aires y el NOA -entre Tucumán, y Salta poseen unas 600 cabezas; mientras Santiago del Estero ya tiene unas 2.600-.
También explicó que la primera etapa fue de alguna manera llevada adelante por empresas de escala mediana y grande, "que fueron las que podían afrontar proyectos a largo plazo porque el búfalo no se cruza con el vacuno, sino que hay que comprar el rodeo e irlo incrementando."
Indicó que en esta segunda etapa la apuesta también es con el pequeño y mediano productor, "ya que se da la posibilidad de que puedan realizar una producción intensiva, que además coincide con la etapa de desarrollo de la zona del subtrópico argentino."
Asimismo, señaló como factor a tener en cuenta, el apoyo que se está realizando desde los gobiernos provinciales y el Ministerio de Agricultura y Ganadería de la Nación, "ya que el pequeño productor no cuenta con la capacidad financiera para poder enfrentar sólo una inversión de magnitud, y tampoco para tener acceso a la tecnología."
En ese sentido, Sava hizo hincapié en que el Estado y las provincias están jugando su rol, "sobre todo Formosa, Corrientes, y ahora también Chaco. En Formosa lo que hacen, aparte del trabajo en los centros universitarios que es fundamental para ir formando profesionales en la materia, están trabajando para difundir el conocimiento acera del manejo de búfalos con técnicos de la provincia en distintas oficinas locales. También realizan un estudio para entregar a algunos productores una cantidad reducida de animales, y la idea es realizar un seguimiento y que ese pequeño productor luego pueda pagar su deuda con terneros."
Mientras tanto, las demás provincias están mirando esa experiencia, y cuentan también con algunos fondos disponibles para el desarrollo de economías regionales.
Mejores rendimientos
Al referirse a las características del búfalo, Sava remarcó que es un animal longevo, con una mortandad menor a la del vacuno, "en lugar de reponer el 10 por ciento anual del rodeo, como se hace en el vacuno; se repone el 5 por ciento porque la hembra pare durante 18 - 20 años en lugar de parir cada 10 años. Por eso es que el nacimiento es importante en el crecimiento de la población."
En cuanto a la producción de carne -en condiciones de subtrópico húmedo- "estamos hablando fácilmente de un 15 por ciento más de parición. Es decir que si la zona habitualmente es del 50 por ciento de parición con vacunos, en búfalos llega al 78 por ciento de parición. En cuanto a ganancia de peso, es de un 60 por ciento más por día, lo que equivale a tener la res –el animal terminado- con un año y medio menos de edad, comparado con novillos vacunos que se engordan en el Norte." detalló Sava.
En lo que respecta a la leche, explicó que "no tiene la producción de la leche vacuna, y que10 litros equivalen a 25 o 30 litros de leche de vaca por la concentración de grasa. Tiene tres veces mayor concentración de grasa butirosa, que en el caso de la vaca."
El queso muzzarela es el gancho comercial para el mercado de búfala lechera. El tema es que se necesita manejar muy bien el know how, "puede ser tecnología de avanzada con todo mecanizado, y por otro lado puede ser tecnología artesanal pero muy sofisticada para la excelencia del producto" afirmó.
Asimismo, en el caso de la muzzarela se presenta también un problema de logística para llegar a los mercados de consumo que son las ciudades grandes, porque están lejos del subtrópico, y son más de 1000 kilómetros de distancia. En vez, explicó que el queso fresco rinde más, y si bien no se vende como el queso muzzarela se comercializa como queso criollo dentro del pueblo cercano al campo, con un precio aceptable y rinde muy bien en kilaje porque es muy requerido por la población local.
Más promoción
A pesar de estar produciendo hace 35 años, Sava comentó que están intentando darle más impulso a la difusión de la carne de búfalo, que es considerada según las últimas investigaciones, como una alimento nutracéutico, "con más tenor de hierro, un 40 por ciento menos de colesterol, y con más colesterol benigno. Además, en cuanto a su aspecto es agradable, ya que presenta grasa subcutánea, y no tiene beteado. En su apariencia es similar al novillo Holando."
Al referirse a su comercialización, explicó que la res se vende mejor que el animal en pie, y se trata de una res "con una grasa muy blanca -porque el búfalo no tiene carotenos-, por eso tanto la leche como la grasa son absolutamente blancas, y la carne es de un color rosado. Tanto la res como los cortes son atrayentes a la vista."
Un tema importante que destacó es que debe faenarse el animal a la edad correcta. "Hay que tener en cuenta que muchos países del mundo lo usan para el trabajo, por ejemplo tirando canoas en los ríos –porque también nadan- , para el transporte de la fruta, o de tiro para el arado. Entonces ese animal no va producir buena carne porque tiene mucho tejido conectivo. Lo correcto es que el novillo de búfalo (bubillo) se faene a los 27 meses, con 550 kilos; si se lo quiere apurar para tener menos edad, se lo puede poner algunos meses en una pastura subtropical y se puede entregar el búfalo con 24 meses también, con 500 kilos. Entonces ese animal con esa edad es muy tierno y presenta la carne que tiene que ser."
El problema cultural
Pero al hablar de las potencialidades de la carne y leche de búfalos, para Marcos Sava hay un escollo que superar y es el tema cultural, "porque la sociedad argentina es una de las que más consume carne vacuna en el mundo, en todos los estratos sociales, incluso los más bajos que además son los más conservadores. El pueblo es muy conservador en sus costumbres, hasta para comer pescado o pollo. En lo que respecta al búfalo los cortes son los mismos, y se pueden cocinar en asados, al horno o a la cacerola como los vacunos."
También agregó que "el problema es que con 100 mil cabezas, se sacan 45 mil vientres en producción, quiere decir que hay 40 mil terneros por año, y con esas cifras no se pueden hacer grandes inversión para promocionar el consumo de la carne de búfalo. Creo que ese problema cultural va a cambiar el día que se invierta mucho dinero para promocionar las bondades de este producto; o con el tiempo a medida que vaya aumentando la producción, y entonces la sociedad va a ir acostumbrándose más al nombre de búfalo, y a que se puede consumir ese tipo de carne también."
Los caminos de la exportación
En relación con los mercados externos para la carne y leche de búfalo, comentó que desde hace más de un año se está trabajando en exportación extra Hilton con cinco cortes de búfalo a Alemania; y hay un grupo de productores que exportan a Holanda desde el 2007 por fuera de la Asociación. Allí se venden los cortes de valor y el resto queda en el país.
Según Sava, "lo que se denomina la integración de la res al principio fue un problema, porque no se sabía qué hacer con lo que quedaba, pero luego se fue colocando ese producto muy bien."
Hoy los grandes productores de carne de búfalo del país son quienes están abriendo las puertas para la exportación a Europa.
Con respecto a la lechería, explicó que hay poco desarrollado aún en el país. La producción lechera de búfalos comenzó en el año 92, y todavía no tuvo un crecimiento como el de la carne. "Hay un sólo productor lechero que ya lleva 15 años en el mercado, que está en Torres –al lado de Luján, en la provincia de Buenos Aires-, y que entrega toda su producción -a un valor equivalente a cuatro veces la leche de vaca-, a una planta industrial que tiene al lado donde todo se destina a producir muzzarela. El 80 por ciento se vende como marca registrada en los supermercados del país, y el 20 por ciento restante se exporta a Santiago de Chile, donde hay una buena demanda. Pero es un caso puntual, y estamos hablando de un ordeñe de 120 hembras, con una producción diaria que va entre 700 y 800 litros, que son aproximadamente 140-180 kilos de queso por día."
Según dijo, un punto a tener en cuenta es que "hoy los empresarios se encuentran con una realidad diferente en relación con 10 años atrás, porque la hectárea que tienen pasó a valer mucho más que antes, entonces necesitan hacerla producir más. Por eso poco a poco se están empezando a volcar más a la producción lechera. Por ejemplo, también hay otro productor en el Chaco que está organizando un feed lot con búfalos. Eso es algo antes impensado. "
Asociación Argentina de Criadores de Búfalos
La Institución fue fundada en 1983 para promover la producción de búfalos, proveyendo formación e información técnica, organizando planes de selección, promoviendo remates, investigaciones (sobre carne, leche, reproducción) organizando y participando de congresos. En 1985 se abrieron los registros de las 3 razas existentes en el país, Mediterranea, Murrah y Jafarabadi. Actualmente cuenta con más de 100 socios. Integra la Asociación de Búfalos para las Américas y es miembro fundador de la International Buffalo Federation.