Advierten por el hundimiento de un remolcador
Nos contactamos con el secretario general del Sindicato de Dragado y Balizamiento, seccional Paraná, Lic. Oscar Barbieri, quien se refirió a la situación del remolque 286-B Chorotí, que se encuentra en estado de hundimiento. En ese sentido nos brindó su opinión y explicación de lo ocurrido. Destacó además, que forma parte de un sindicato que más allá de reclamar y estar siempre en la lucha, se caraterizan por realizar propuestas superadoras.
Al ver el hundimiento del remolcador 286-B Chorotí, es inevitable recordar, con desosiego, el camino recorrido para llegar a tal situación. Podemos pensar como un punto de partida de la década '80 donde se realizaba el dragado y el balizamiento bajo la gestión estatal con personal calificado y con una flota propia plenamente operativa, de la cual algunas dragas fueron construidas en nuestro país.
Desde los años 90, sobrevino el tsunami privatista donde se instauró una política de desguace del Estado, situación que nunca se revirtió a lo largo de todos estos años y a la fecha. He aquí la respuesta al por qué tenemos una embarcación más hundida, una más de las que vendrán si se sigue con este rumbo. Tal es así, que en Paraná, están en riesgo el Balizador 363, la Grúa G8, cómo así también la Draga 259, que se encuentra en estado crítico, varada en Mar del Plata, párrafo aparte el Balizador 562, recuperado por el estado en noviembre del 2021, a espera de la firma de un convenio entre la CARU y el Ministerio de Transporte de la Nación, el cual está perdido en Laberinto de Dédalo y la burocracia e impericia de algunos funcionarios.
Está clara la importancia de las vías navegables para el desarrollo nacional, que hoy es aprovechado por nuestros países hermanos, más no por nosotros en la debida medida. Pensarnos como una Nación que avanza en el sendero de la producción y el empleo es pensarnos también como una nación que, mediante políticas públicas activas, ofrezca las condiciones y las oportunidades para ser competitivos en el mundo y sacar verdadero provecho en el contexto internacional que hoy nos es favorable.
Es posible dar una nueva dinámica a esta situación, y como primer paso proponemos un cambio en la figura jurídica de la repartición, ya sea una empresa mixta estatal-privada o un ente autárquico, que permita que volvamos a tener en primera instancia la soberanía sobre las vías navegables interiores, y además de las herramientas para cumplir una buena tarea de manera eficaz y eficiente, en tiempo y forma.
Simplemente bastaría con que los trabajadores sean escuchados por los tomadores de decisión. En particular, en Paraná tenemos talleres ociosos y la dársena que no está ocupada, por lo que propusimos ya en año 2013 y en reiteradas ocasiones desde entonces, la conformación de un polo científico, tecnológico y productivo naval fluvial, un astillero para reparar y construir pequeñas embarcaciones y también de una guardería náutica para darle funcionalidad y poner en valor esos espacios.
Están las iniciativas, falta la voluntad política de avanzar en ese sentido, lo cual sucede también con la Promoción de la Industria Naval (ley 27418), la Marina Mercante (ley 27419) y la recuperación del flete fluviomarítimo nacional. Argentino a las cosas...