Informe de la CIRA

Las tarifas portuarias en la Argentina son las más caras de la región

En una Argentina que se postula hacia el camino de la competencia se torna indispensable comparar la actualidad de ciertos costos dentro del comercio exterior para evaluar cuál es la situación del país respecto de la región, con el fin de encontrar soluciones que mejoren las condiciones de toda la cadena de valor de la importación y exportación. La CIRA elaboróun informe sobre los costos portuarios que pueden descargar al final del presente documento.


23 de octubre de 2024

La realidad de los puertos en nuestro país demanda una profunda discusión sobre sus costos, la situación jurídica de los pliegos de licitación, la necesidad de securitizar y otorgar mayor trazabilidad a los movimientos de carga, auditar y transparentar la productividad y la capacidad operativa de las Terminales y una agenda de temas con alto impacto para la producción y el consumo de los argentinos.

Comparar una “tarifa núcleo” entre los puertos de contenedores en Buenos Aires y otras ciudades de Latinoamérica como Valparaíso, Santos, Montevideo o Lima, pone en evidencia un extra-costo para los argentinos entre un 50% y 500% según el tipo de contenedor y operación. Solamente por una verificación exhaustiva en canal rojo se suman a la operación habitual otros costos extraordinarios por montos que podrían superar los 3.000 dólares.

Pero además surgen otros aspectos problemáticos como la falta de disponibilidad de turnos para retirar las mercaderías dentro del plazo de arribo forzoso (Tarifa 1); la cantidad de extra movimientos facturados que son incomprobables; el doble cobro del Terminal Handling Charge por parte de la Terminal y la Línea Naviera (cuando es un servicio que solo se presta una vez); porque se considera el contenedor de 40 pies high cube como un equipo fuera de medida (con importantes extra-costos) cuando desde hace casi dos décadas es el contenedor más usado y frecuente en el comercio internacional y una cantidad de trámites administrativos en la órbita portuaria que son obsoletos y requieren de aplicación de nuevas tecnologías que faciliten la acción de los agentes de comercio exterior para garantizar rapidez y control por parte del Estado, para lograr así eficiencia en los tiempos, securitización de la información y trazabilidad para el Estado Nacional y los privados.

El presente trabajo encara no solamente la situación actual de las tarifas, sino también alguno de los aspectos mencionados anteriormente y que bien vale la pena profundizar con el objeto de discutir una política portuaria que responda a las necesidades del comercio internacional y no viceversa.