Capitán Sergio Borrelli: “La hidrovía es un tesoro y hay que dejar de discutir slogans para empezar a gestionar en serio”
En una charla exclusiva con Comex, el ex interventor de la Administración General de Puertos (AGP) y práctico analizó el escenario ambiental, la futura licitación de la hidrovía y los desafíos logísticos del país. Reclamó una mirada “multimodal, responsable y técnica” para evitar decisiones que terminen restando competitividad a la producción argentina.
“Si baja el calado, aumenta el número de buques y camiones: todo tiene un impacto ambiental”
En diálogo con Comex, Borrelli advirtió que el debate ambiental “no puede seguir aislado del análisis del sistema logístico completo”. “El tema hay que abordarlo sistémica y multimodalmente. No se puede hablar de ambiente si no comparás un daño con otro”, sostuvo.
Recordó que durante la bajante histórica del río Paraná, la reducción del calado generó un incremento del 25% en la cantidad de barcos necesarios para transportar el mismo volumen. “Y una parte de esa carga directamente se fue a camiones, a Bahía Blanca o a otros puertos. Ahí también hay un daño: más tránsito, más huella, más costo. Sacar vehículos de la carretera es algo que hay que medir”, explicó.
Según el capitán, los diagnósticos ambientales aislados son insuficientes: “Si no tomamos todos los medios de transporte y los ponemos en un mismo análisis, estamos tirando datos al aire”.
“No hay producción sin impacto, pero sí puede haber buena gestión”
Borrelli también se mostró crítico de los discursos que, según él, “usan el ambientalismo para inclinar la balanza hacia ciertos negocios”. “La actitud debe ser responsable, no alarmista. Si hay producción, va a haber impacto ambiental. La cuestión es gestionarlo bien”, afirmó.
Agregó que cuando la logística se encarece, los efectos no se ven de inmediato en los puertos, sino en la capacidad productiva del país: “No te encontrás con una cola de camiones sin barco para cargar. Lo que pasa es que al productor se le complica y el mercado se va restringiendo. La frontera agrícola no avanza porque hay zonas donde producir ya es demasiado caro”.
“El tren es óptimo hasta que llegaste al agua; después no queda alternativa que el barco”
El práctico reivindicó la necesidad de impulsar el multimodalismo, pero advirtió sobre sus límites operativos: “El transporte multimodal es un invento genial hasta que empezás a sumar los costos y las pérdidas de eficiencia en cada transbordo”.
Según Borrelli, esa es la razón por la que muchos camiones viajan directamente desde el NOA al Gran Rosario en vez de optar por barcaza: “La diferencia de flete no justifica desviar a un puerto de barcazas cuando hay que hacer un transbordo. El tren directo sería lo más eficiente”.
“La hidrovía es imprescindible y el Río de la Plata permite profundizar más”
Consultado sobre los desafíos de dragado, fue contundente: “No tengo ninguna duda de que en el Río de la Plata deberíamos tener 40 pies. El canal es una zanjita dentro de un río anchísimo. La obra para llevarlo a 14 metros es mínima y en tramos puntuales. No hay un concepto ambiental sólido que lo refute”.
En este punto, el práctico introdujo un matiz clave: si bien el Río de la Plata ofrece condiciones favorables para avanzar sin grandes cuestionamientos técnicos, el Paraná “requiere un análisis un poco más exhaustivo desde el punto de vista ambiental”. Sin embargo, aclaró que ese examen debe hacerse “de manera integral” y no en función de percepciones o especulaciones aisladas.
Y dejó una reflexión que expone la falta de continuidad histórica: “Si hubiéramos empezado a profundizar desde la última vez que llegamos a 34 pies, hoy probablemente estaríamos cerca de los 40. O, en todo caso, nos habríamos detenido si encontrábamos dificultades reales para gestionar sedimentos o impactos ambientales. Pero no lo hicimos, y perdimos tiempo valioso”.
Borrelli remarcó que limitar el calado tiene efectos concretos: “Más chimeneas, más tráfico, más riesgo de accidentes. Todo lo contrario de lo que uno buscaría desde un enfoque ambiental”.
Licitación de la hidrovía: “Hay que preservar lo que ya tenemos”
Sobre el proceso licitatorio, el ex interventor de la AGP señaló: “La licitación está claramente enfocada en mantener lo que está y luego encarar la profundización. Y está bien que así sea. No hay grandes innovaciones porque lo primero es cuidar hasta dónde llegamos. Esto que tenemos es un tesoro”.
Sin embargo, cuestionó parte del debate político: “Los gobernadores opinan según quien los asesore y muchas veces no están bien asesorados. Y en la Argentina siempre hay dos polos de opinión para todo”.
Respecto a la posibilidad de dividir la vía navegable por tramos, observó: “Es divisible el área fluvial del área marítima, pero no tengo información al respecto”. Para él, el foco debe estar en las necesidades del Estado: “Si te dejás llevar por la problemática individual de las empresas prestadoras, perdés el rumbo. Hay que escuchar a la parte técnica”.
Borrelli sugirió también que las concesiones deberían revisarse cada diez años “para garantizar eficiencia y adaptación a los cambios, dentro de una concesión larga o sin vencimiento, salvo por causas que lo justifiquen”.
“Funciona. Hay que producir más, mover fronteras y llegar al río”
En el cierre de la charla exclusiva con Comex, el capitán dejó un mensaje claro: “Tenemos algo que funciona. Hay que potenciar el multimodalismo, impulsar la producción, fortalecer el tren y llegar mejor al río para sacar más carga. Pero, sobre todo, hay que cuidar lo que ya tenemos”.








































