La profesión del práctico

Al terminar su servicio como asesor de ruta y gobierno de un buque extranjero y ya desembarcado en San Nicolas trasmitió la siguiente semblanza:

“Un día como hoy, 4 de diciembre, pero hace 30 años, me entregaron la Libreta de Practico. Parece mentira que haya pasado todo ese tiempo. Siento, aún hoy, que estoy como en esa fecha, aprendiendo en cada viaje a pesar de haber terminado hace unos minutos mi viaje número 3096. Me viene a la memoria lo que pensaba antes de tomar la decisión de ser práctico. Ese pensamiento encerraba la angustia que tenía de un futuro realizando todos los años la misma ruta, el mismo río. Pensaba en el aburrimiento que sentiría con el paso del tiempo. Nada más alejado de la realidad."

"Pasó todo este tiempo y lo sigo disfrutando como el primer día, y mas aun porque con toda la experiencia que se acumula con el transcurso de los años y las navegaciones le permite a uno disfrutar plenamente la actividad."

"Satisfacciones muchísimas. Por ejemplo como la que viví hoy sin ir más lejos, la situación con un capitán extranjero, con todo su conocimiento y experiencia, bien preparado profesionalmente, pero con temor a navegar en zonas tan restringidas, con corrientes, tráfico, etc. Despacio uno va hablando, explicando lo que se va a hacer, y el capitán confiando y con el resultado de una navegación satisfactoria termina dándome la mano agradeciendo y rogando que la navegación aguas abajo la volvamos a compartir."

"Treinta años pasaron, parece increíble el tiempo que pasó, pero las ganas y la pasión siguen intactas”.

Esta breve reseña pinta en cuerpo y alma al práctico argentino.

Hoy en día, además de cumplir con sus funciones a cargo de la empresa de practicaje PILOTAGE SA, y como presidente de la cámara que agrupa a las empresas del sector, el Capitán Ryan continúa trabajando como Práctico del Río Paraná, como hace 30 años de aquel primer asesoramiento a un capitán extranjero.